Cada 22 de septiembre se celebra en todo el mundo esta iniciativa que propone abordar la gran dependencia de combustibles fósiles con la que desarrollamos nuestro día a día, reflejadas en el uso puntual de los automóviles, con el objetivo de concientizar sobre el daño al medio ambiente que provoca el uso masivo de vehículos particulares, y promover el uso del sistema de transporte público y de la bicicleta.
Este día nos invita a optar por otros medios de desplazamiento y de esta forma analizar nuestro comportamiento como sociedad frente al transporte tanto público como privado, generar conciencia sobre el fuerte impacto de los medios de transporte basados en combustibles fósiles a nivel polución y también contaminación sonora, entre otras.
De esta forma se transmite la necesidad de buscar nuevos esquemas de movilidad sustentable que nos permitan disminuir la contaminación, buscar nuevas alternativas y discutir cual es el modelo de ciudad que queremos a futuro, frente a un cambio climático que llegó hace tiempo y demanda acciones individuales y colectivas de manera urgente. Para esto es importante disponer de alternativas al vehículo particular que sean atractivas para el ciudadano es hoy una prioridad. Bicicletas, patinetes, transporte público o taxis, son muchas las opciones de las que podemos disponer para movernos por la ciudad.
La Bicicleta: la alternativa sustentable y saludable de movilidad
El uso diario de la bicicleta es una ayuda para mejorar tanto tu salud física y emocional como también reduce tu impacto en el medioambiente:
- Reduce los niveles de colesterol en la sangre.
- Minimiza los niveles de estrés y mejora el estado de ánimo.
- Es una excelente forma de combatir la obesidad.
- Reduce el riesgo de sufrir infarto o problemas cerebrovasculares.
- No produce gases tóxicos.
- Supone menos espacio: 16 bicicletas ocupan lo mismo que un vehículo.
- Ahorra tiempo
El Transporte Público: el Estado como garante de movilidad y sustenibilidad
· Contamina menos que el vehículo privado. El transporte público es la alternativa más ecológica para los desplazamientos que se hacen en la ciudad. La emisión de gases es mucho menor.
· El uso masivo del vehículo privado colapsa las ciudades y las hace más sucias y más ruidosas. Por eso el transporte público es la alternativa idónea para mejorar la movilidad urbana y evitar en gran medida las retenciones y atascos.
· Usar el transporte público resulta más barato que el vehículo privado. Calcula los gastos del automóvil, además de su mantenimiento, seguro, aparcamiento y combustible.
· Ahorras tiempo. Muchas veces el uso del automóvil conlleva la búsqueda de aparcamiento en zonas saturadas. Con el transporte público llegas a tu destino sin complicaciones y sin estrés.
Hoy, la pandemia que afronta el mundo nos lleva a contemplar nuevos factores debido a la necesidad de extremar cuidados y distancias, por lo cual, nuevamente el movimiento de los ciudadanos en las grandes urbes se pone en la agenda de debates urbanísticos para lograr modelos seguros a nivel sanitario, pero que deben acompañar las demandas económicas y medioambientales necesarias con una planificación a largo plazo que corrija los desequilibrios acarreados hasta el momento.
Debemos optar por opciones sustentables como pueden ser caminar o el uso de bicicletas y lograr redes de transporte público eficientes y extensivas, a fin de lograr ciudades ágiles, saludables y equilibradas.