Este año nos ha encontrado con nuevas responsabilidades, nuevas acciones y el lugar de siempre: la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires.
El objetivo de este año fue aprovechar la llegada de nuevos Defensores Adjuntos para potenciar nuestro trabajo, ganar especificidad y animarnos a avanzar hacia nuevos derechos. Fue así que nos dimos el lujo de empezar a trabajar las áreas de medioambiente y urbanismo, abordamos problemáticas de salud mental y consumo de sustancias y tuvimos la enorme tarea de hacernos responsables de la Adjuntía del cliente bancario.
Desde junio, y gracias a un convenio celebrado entre la Defensoría del Pueblo de la Ciudad y la Facultad de Odontología de la Universidad de Buenos Aires, los barrios de Villa Soldati y Bajo Flores cuentan con programas móviles de atención odontológica. Fue así cómo empezaron las visitas con el tráiler odontológico universitario: un móvil completamente equipado para recorrer el territorio y brindar salud a donde a veces se le dificulta llegar. En estas visitas los vecinos encuentran a su disposición atención integral (extracciones, arreglos de caries, limpiezas, etc) para niños como adultos de forma totalmente gratuita.
Estamos altamente conformes con los resultados que tuvo esta experiencia de articulación entre instituciones y de extensión universitaria.
También trabajamos sobre la ampliación de derechos. En este sentido acompañamos y profundizado el debate por la regulación del cannabis. Así durante el año nos reunimos con diferentes organizaciones cannabicas, para conocer las problemáticas que las atraviesan y poder trabajar sobre políticas públicas acordes a las necesidades de este colectivo.
Pero el trabajo no es solo puertas adentro, sino que también salimos a la calle a concientizar sobre la problemática de miles de personas que hoy están presas por la situación de ilegalidad del cannabis, por eso participamos en la “ExpoCannabis”, asesorando a todos y todas aquellas personas que quisieran saber un poco más de la situación legal del cannabis y sus derivados. Al mismo tiempo impulsamos la recolección de firmas con el objetivo de exigir que se amplíen las patologías que se habilitan a tratar con cannabis, siendo que hoy día solo es tratable la epilepsia refractaria. Estamos confiados que es el camino correcto no solo para mejorar la calidad de vida de nuestros ciudadanos, sino también para garantizar las libertades. Seguiremos trabajando para que el 2020 nos encuentre con más debate y cada vez un poco más cerca de un cannabis legal y sin más presos y presas por cultivar.
En un año que ha tenido al ambiente como uno de sus temas centrales he tenido la suerte de poder trabajar en los derechos que le competen. Hoy es fundamental hablar del ambiente de forma transversal. Sólo de esa forma entendemos que lo que le pasa al mundo del que somos parte tiene un impacto concreto en nuestra salud, nuestra economía y nuestro bienestar general.
Hemos podido conocer organizaciones y funcionarios que tienen al ambiente como una prioridad y hemos trabado una relación que el año que viene nos encontrará conquistando más derechos para proteger nuestro medio.
Un avance enorme que hemos logrado ha sido la creación del Foro Permanente por la Cuenca Matanza – Riachuelo. Allí nos reunimos con defensorías zonales, organismos de la Sociedad Civil, Universidades y medios de prensa para impulsar una agenda de pronto saneamiento del cuerpo de agua y de preservación de la salud de quienes habitan en sus márgenes.
También logramos presentar un proyecto de ley para lograr descuentos en el ABL en proporción al material reciclado. El proyecto busca fomentar las prácticas de reciclado en origen para lograr un aliviamiento de los rellenos sanitarias a la vez que se estimula una buena práctica a nivel vecinal.
Otra responsabilidad que se me encomendó durante esta gestión ha sido la Adjuntía del Cliente Bancario, un espacio dentro de la Defensoría donde me pude encontrar con un equipo altamente capacitado en la protección de los derechos de los consumidores. Desde este nuevo rol, además de poder atender más de 200 reclamos, avanzamos en reuniones con la Subgerenta General de Protección del Usuario de Servicios Financieros y el equipo de la Gerencia de Análisis Técnico Legal del Banco Central de la República Argentina en las cuales se acordó y se puso en funcionamiento un mecanismo de consulta, derivación y respuesta directa entre la Adjuntía y el BCRA.
Durante este año también trabajamos para lograr una mayor inclusión de las personas con discapacidad. Logramos planes viables de accesibilidad a las líneas de subterráneo, pugnamos por la aprobación del proyecto “Felices Fiestas para Todos” para que las personas con autismo también puedan disfrutar de las fiestas. Además convocamos a reuniones de trabajo para abordar las temáticas referidas a la reducción de horas semanales de ejercicio profesional que cubren las obras sociales y visibilizamos y participamos del acto por el día mundial por la concientización sobre el autismo.
Así el 2020 nos encuentra atravesados por nuevos e interesantes desafíos que hoy más que nunca, estamos expectantes y deseosos de abordar con el mayor de los compromisos, para seguir construyendo derechos y hacer de la Ciudad de Buenos Aires, una ciudad de iguales.